En la construcción las medidas de seguridad no pueden pasar desapercibidas y menos pueden ser obviadas, aquí te hablamos del uso del casco
El casco de seguridad es un elemento imprescindible en labores de construcción y debe ser llevado por todos aquellos que trabajen directamente o visiten un área que esté en levantamiento o en obras.
Este es un equipo que protege a las personas de los peligros y accidentes laborales tales como golpes, caídas, accidentes eléctricos, térmicos o mecánicos, por lo que es de uso obligatorio.
Los cascos de seguridad deben seguir una normativa y un código de colores, esto porque cada uno tiene además de jerarquías, especificaciones especiales para la debida protección del usuario.
Por lo general, los trabajadores deben usar cascos del tipo protección industrial, los que se rigen por una normativa que incluye requisitos como la absorción de impactos: resistencia a la perforación y de no contacto con cabeza.
Se recomienda a los empleadores siempre comprar cascos de seguridad para sus equipos que cumplan esos requisitos y que revisen que cada uno de estos contenga las siguientes especificaciones impresas en los mismos para comprobar que son equipos originales y de calidad.
- La normativa mediante la cual se diseñaron.
- El nombre y datos del fabricante.
- Fecha de fabricación.
- Tipo de casco de seguridad.
Estos cascos deben evidentemente tener casquete, una banda de cabeza (arnés) y otros dispositivos de fijación. Es decir, los cascos no deben ser decorativos o estéticos.
En la construcción de obras con cemento se debe usar casco siempre y sobre todo cuando se trabaje debajo y cerca de andamios, en áreas que requieran altura y edificación, en encofrados y evidentemente en demoliciones.
Además durante las labores de perforación previas a la construcción y durante la carga de materiales también debe usarse el casco de seguridad.
En segundo lugar, los cascos de seguridad que se usan en la industria tienen un código de colores para identificar a los encargados de cada tarea.
Por ejemplo, el casco de seguridad color blanco lo llevan las autoridades de la obra tales como ingenieros, arquitectos, supervisores y administrativos.
Los maestros de obra por lo general llevan cascos de seguridad color naranja, mientras que el personal operario y los trabajadores usan colores amarillos.
Los fontaneros y electricistas usan cascos de seguridad color azul, mientras que los soldadores, estructuras metálicas y trabajadores de alto calor usan el color marrón.
El personal fuera de la obra usan verde cuando son oficiales de seguridad y el personal de higiene, mientras que el color rojo es para bomberos y personal de emergencias o brigadas médicas.
Finalmente, las visitas o externos en una obra, generalmente llevan cascos de seguridad color gris.
Todo esto, es una normativa general propuesta por la industria de la construcción a nivel mundial, sin embargo, hay algunas empresas que también usan sus propios códigos de colores de forma interna.
Se recomienda a todo trabajador siempre mantener una limpieza regular en el casco, pues además de ser un equipo de seguridad es una herramienta de trabajo de uso personal por lo que también se debe almacenar en lugares seguros.
Estos cascos deben ser revisados periódicamente para corroborar su usabilidad y efectividad.